Prácticamente la mitad de las personas económicamente activas en Colombia trabajan de forma independiente: Son unos 12 millones de personas que se desempeñan sin ninguna modalidad que los vincule laboralmente a una empresa.
“Es un 48% de la población laboralmente activa entre los que se encuentran desde abogados y odontólogos hasta recolectores de café y transportadores y hacen de Colombia una de las naciones que más trabajadores independientes tiene de toda Latinoamérica. Colombia está dentro de las naciones que superan el promedio global en cuanto a trabajadores independientes por país, que se ubica en un 30%.”, afirma Manuel Colmenares, director general de Sodexo Colombia, organización que por más de 25 años ha trabajado por el bienestar y la calidad de vida de la población laboralmente activa en Colombia.
Se espera que en los próximos años ese promedio global suba a 45%, mientras el porcentaje de independientes en Colombia ascienda a su vez a 55%, en gran parte por la pandemia, que forzó a muchos a derivar su sustento de actividades por cuenta propia.
Y eso ¿qué implica?
Se calcula que pronto los independientes superarán el número de personas con un contrato laboral (indefinido o término fijo), y esto hará que, por ejemplo, el hueco que ya existe en el sistema pensional, que es de unos 30 billones de pesos, será cada vez más grande, pues nada más hoy, de estos 9,5 millones de independientes actuales, solo cotiza un 22%, es decir cerca de 2 millones.
“Ese 78% restante es una población desatendida, que muchas veces no cuenta con la educación ni la concientización para cumplir con este requisito de ley. De hecho, el 22% que sí cotiza también es una población desatendida, pues todos realizan este trámite, la conocida planilla, de manera manual y no cuentan con herramientas que le permitan surtir un proceso ágil y correcto. Las alternativas disponibles pueden llegar a ser engorrosas, generar errores y otros inconvenientes.”, explica Manuel Colmenares, director general Sodexo Colombia.
¿Qué podemos hacer?
La accesibilidad que ofrezcan las empresas a sus contratistas independientes juega un papel clave para formalizar este trámite, generando una protección tanto para el independiente como para la organización frente a riesgos ante la Unidad de Gestión Pensional y Parafiscales (UGPP) y la DIAN; riesgos legales, tributarios y de vinculación laboral; adicional a multas, altos costos, gasto de papel y exceso de personal para poder revisar toda la documentación, entre otros problemas.