El mercado de deuda pública y privada ha incluido a un nuevo jugador con los bonos ESG o bonos sostenibles. Esta forma de financiación en lo corrido del año ha multiplicado por tres su valor de emisiones, lo que demuestra su amplio potencial. Su importancia radica en que los recursos son usados para proyectos encaminados al desarrollo sostenible.
Durante su intervención en el Congreso de Tesorería y Simposio de Mercado de Capitales 2021, Andrés García, director de Clientes Globales y Sostenibilidad de BBVA en Colombia aseguró que “el sistema financiero está llamado a desempeñar un papel capitalizador en la transición hacia un mundo más sostenible”.
“En tan solo seis meses de 2021, la emisión de deuda sostenible alcanzó un nuevo récord multiplicando por tres la dinámica presentada en el mismo periodo del año anterior y en línea con la tendencia de los últimos años. Se estima que se cierre 2021 con emisiones del orden de los 900 billones de dólares resaltando el crecimiento relevante de los Bonos Sociales y Sustainability Linked”, explicó García.
El tamaño actual del mercado de bonos ESG es de 1,7 trillones de dólares que equivalente a un estimado de 1,4% del total de bonos en circulación global, de ahí que tiene un gran potencial para ampliar esa participación según lo muestra la creciente dinámica de los años recientes.
Aunque los bonos ESG europeos representan el 48% del total de emisiones sostenibles en el mundo en lo corrido de 2021, Latinoamérica también quiere abrirse un espacio. “Se estima que las emisiones de los mercados emergentes continúen aumentando este año ya que los inversores y emisores muestran un interés creciente en este tipo de instrumentos en la región”, explicó el director de Sostenibilidad de BBVA en Colombia.
A lo largo de 2021 la emisión en Latinoamérica de ESG ha totalizado 20,8 billones de dólares, superior en comparación con los 11 billones de dólares en 2020, principalmente impulsada por la emisión del gobierno chileno en formatos sociales y sostenibles.