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La resistencia antimicrobiana (RAM) se ha convertido en una amenaza global para la salud pública: responsable de cinco millones de muertes anuales por infecciones multirresistentes, con una proyección de 10 millones de muertes en 2050 y pérdidas económicas de 100 billones de dólares.
Es tal su impacto e importancia que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera uno de los 10 problemas sanitarios urgentes de dimensión mundial, junto con la contaminación del aire y el cambio climático, e incluso se habla de una ‘pandemia silenciosa’.
Ante esta realidad y con el fin de sensibilizar, comunicar y educar sobre la amenaza que representan las bacterias y súper bacterias resistentes, cada año se conmemora la ‘Semana Mundial de Concientización sobre la RAM’, que este año, igual que en 2022, tiene como lema ¡Prevengamos juntos la resistencia a los antimicrobianos!
Colombia se une a esta jornada global con un evento académico científico, que se realizará los días 21 y 22 de noviembre, desde las 8:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde en modalidad híbrida, en el que participarán conferencistas nacionales e internacionales, quienes abordarán temas relacionados con la resistencia antimicrobiana en salud humana, animal y ambiental; investigación en resistencia; educación y apropiación del conocimiento en las comunidades; resistencia antimicrobiana y automedicación, y una visión interactiva de ‘Una salud’.
Es una oportunidad también para que Colombia presente su balance en la consolidación del Plan Nacional de Respuesta a la Resistencia a los Antimicrobianos, así como en las estrategias para el control de las Infecciones Asociadas a la Atención en Salud (IAAS), el programa multimodal de higiene de manos, la implementación de los Programas de Optimización del Uso de Antimicrobianos (PROA).
Para el país ha sido determinante en este trabajo multisectorial, la participación en el proyecto ‘trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos’, con el apoyo económico de la Unión Europea (UE), y la coordinación y apoyo técnico de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), con el enfoque de ‘Una salud’.
“Una labor conjunta para llegar a más sectores y mejorar la concienciación y la comprensión de la resistencia antimicrobiana, apoyar la investigación y la vigilancia de patógenos centinelas, y fomentar acciones para reducir las infecciones asociadas a la atención en salud, optimizar el uso de antimicrobianos y evaluar los riesgos para prevenir la contaminación del medio ambiente”, señala la doctora Gina Tambini, representante de la OPS/OMS Colombia.
En este sentido, ha sido clave el trabajo de la Mesa Técnica Intersectorial, conformada por los Ministerios de Salud y Protección Social (MSPS), Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), y Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS), con sus entidades adscritas Instituto Nacional de Salud (INS), Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA), Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (AGROSAVIA).
Una problemática seria
La RAM se produce cuando las bacterias, los virus, los hongos y los parásitos cambian con el tiempo y dejan de responder a los medicamentos, lo que reduce las opciones para el tratamiento de las infecciones desde leves a complicadas en humanos y animales con un alto impacto en morbi-mortalidad y costos para los sistemas de salud.
Esto puede suceder en infecciones respiratorias, gastrointestinales, de vías urinarias, heridas de la piel, entre muchas otras. La problemática es tan real, que las bacterias resistentes y multirresistentes causan más muertes que el VIH, la malaria y ciertos tipos de cáncer.
La automedicación con antibióticos y otros antimicrobianos, así como el mal uso y abuso de estos, están muy relacionados con la resistencia antimicrobiana, y por ello es fundamental que las comunidades conozcan sobre resistencia antimicrobiana y se motiven a modificar sus hábitos, evitar la automedicación, consultar los servicios de salud a tiempo y seguir las pautas recomendadas de tratamiento.
