Cumplir altos estándares de calidad se ha convertido en una estrategia clave para que las mipymes colombianas alcancen nuevos mercados y aumenten sus ventas.
Por esta razón, cada vez más empresas ajustan sus operaciones para certificarse en normas que les permitan demostrar su calidad.
Un análisis de Colombia Productiva, patrimonio autónomo del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, identificó que seis de cada diez mipymes atendidas en programas especializados en estándares de calidad están interesadas en tres normas clave que les permiten mejorar la eficiencia de sus procesos, aumentar la productividad y elevar la satisfacción de sus clientes.
La más demandada es la ISO 9001, un sistema de gestión de calidad que fortalece la operación de las empresas para mejora de la productividad y que les ayuda a demostrar su capacidad para ofrecer productos y servicios que satisfagan las expectativas de los clientes.
De 2.475 mipymes, que han recibido formación en calidad desde agosto de 2022 con programas del MinCIT, ejecutados por Colombia Productiva, el 29,4 % lo ha hecho en esta norma.
Otras dos normas de calidad que tienen una importante demanda desde las empresas son la ISO 27001 y la del Sistema HSEQ. De las mipymes atendidas, el 14,5 % optó por la primera y el 14,6 %, por la segunda.
Por ejemplo, una empresa del sector software que implementa la ISO 27001 está mejor preparada para garantizar la seguridad de la información. Esta norma establece los requisitos para crear, implementar, mantener y mejorar continuamente un Sistema de Gestión de la Seguridad de la Información (SGSI), con el cual se busca proteger los datos y asegurar su confidencialidad, integridad y disponibilidad.
A su vez, la norma del Sistema HSEQ: Higiene, Seguridad, Calidad y Medio Ambiente, otra de las más solicitadas por las empresas en los programas de formación y acompañamiento técnico en calidad de Colombia Productiva, garantiza que una organización cumple las regulaciones de seguridad y salud, protege el medio ambiente y mejora la calidad de sus productos y servicios.
Según este análisis, otras normas de alto valor para las mipymes colombianas, por su capacidad para abrirles puertas en distintos mercados, son las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y el sistema HACCP.
La norma BPM garantiza que los productos, especialmente alimentos, medicamentos y cosméticos, se produzcan y controlen de forma consistente y segura. Por su parte, la HACCP busca garantizar la inocuidad de los alimentos, al identificar y controlar peligros en la cadena alimentaria, para asegurar que sean aptos para el consumo. Esta norma es demandada por algunos mercados internacionales.