El comienzo de un nuevo año, más allá de las tradicionales alzas en los precios de algunos bienes y servicios, se constituye en una oportunidad para que los microempresarios y sus familias emprendan nuevos proyectos o den continuidad a los que ya vienen en curso, tanto personales como alrededor de su unidad productiva.
Entre ellos pueden estar, por ejemplo, la ampliación de negocios, financiar la educación de los hijos, comprar vivienda (o remodelarla), tener unas vacaciones, entre otros propósitos que pueden hacerse posibles gracias a la construcción de comportamientos que fortalezcan la disciplina de ahorro.
Así, resulta fundamental que los microempresarios y sus familias empiecen desde el primer mes del año a implementar estrategias, así como el uso herramientas y refuerzo de sus conocimientos para manejar de forma efectiva sus finanzas (personales y de sus negocios) lo cual, además, también resultará crucial para materializar propósitos de ahorro e inversión.
Por ello, en el arranque de este 2025, expertos de Bancamía, entidad de la Fundación Microfinanzas BBVA, ponen a disposición de los microempresarios consejos que pueden hacer la diferencia a la hora de construir estabilidad y fortaleza financiera.
Óscar Hernández, gerente de Sostenibilidad de Bancamía, explica que “la clave está en la constancia, la planificación y el uso responsable de los recursos disponibles”. Estos son los cinco consejos para 2025:
Es recomendable destinar un porcentaje del ingreso a una cuenta de ahorros o a un instrumento de inversión, como un Certificado de Depósito a Término (CDT), que puede tener un doble uso: cumplir el proyecto planeado o servir como un fondo de emergencia. En este último caso, la idea es que sea el equivalente a los gastos esenciales del hogar para un periodo de 3 a 6 meses. Además, también existe la opción de invertir en cuentas digitales de alta rentabilidad (como Rentaplus de Bancamía) que permiten disponer del dinero en cualquier momento con una tasa de interés competitiva, de acuerdo con el saldo ahorrado.
Por medio de diferentes iniciativas de educación financiera de carácter gratuito, como por ejemplo la plataforma ‘Facilitamos su progreso’ o los talleres virtuales mensuales de Bancamía, los microempresarios pueden generar habilidades direccionadas a tomar buenas decisiones con el dinero como consolidar metas de ahorro y tener un adecuado manejo de las deudas, aprender a usar la tecnología como aliado para el crecimiento de su negocio y mejorar habilidades personales y de liderazgo. Para acceder a estos cursos pueden ingresar al sitio web www.bancamia.com.co/educacion financiera.
Además, las herramientas de educación financiera son de gran relevancia para orientar a los microempresarios acerca de cómo deben reinvertir sus ganancias en sus unidades productivas, e incluso, fomentar la buena práctica del aseguramiento de su patrimonio buscando la sostenibilidad y crecimiento del negocio.
Adicionalmente, para esta revisión podrá acudirse al uso de herramientas financieras de control como la elaboración de presupuestos, ya sea de forma física (papel y lápiz), o de forma digital como una hoja de cálculo o alguna aplicación móvil.
Contar con un seguro les brindará tranquilidad y una mayor capacidad de recuperación en el caso de que se materialice algún tipo de siniestro. Así mismo, tener coberturas más amplias contribuye a aportar a la construcción de salud financiera ante situaciones inesperadas para las que siempre es bueno estar preparados.